Reflexionando

Mil razones para olvidarte, pero mi corazón solo me deja ver un mil tonterías para amarte cada vez más… que frase mas triste, estupideces que nacen de un imbécil que al parecer disfruta con mucho fervor el dolor de no ser correspondido, es una frase que solo podría nacer de la corta inspiración del típico masoquista de profesión. Buff patético, no hay otra palabra para describir la posición que adopto cuando de hablar de ella se trata, y es que pensar en ella hace que cada vez me sienta mas insignificante, esta muy claro lo que debo hacer, pero como dicen popularmente, “del dicho al hecho hay mucho trecho” lo más difícil de esta situación es que para poder hacer lo deseado sin dejar de hablar con ella, me tocaría recurrir a la hipocresía y es entonces cuando entro en conflicto con mi “moral”

Refugiado en la soledad de mí cuarto, imaginado tu cuerpo sobre mi cama y anhelando un beso de tus labios, así transcurren mis días uno tras otro esperando que algún milagro te traiga a mí o te saque por completo de mi vida. Me encuentro en constante conflicto con mi deseo de seguir la vida sin el sentir de tu presencia…